Claves para pasar con éxito una entrevista de trabajo

  • Sé puntual. Llega diez minutos antes de la hora a la que te han citado. Antes, tampoco es bueno. Así que si llegas con demasiada antelación, date una vuelta por los alrededores.
  • No mientas sobre tu nivel de idiomas. Si lo has hecho en el currículum, en la entrevista te encontrarás con un problema: es posible que el entrevistador decida preguntarte en los idiomas que has dicho que conoces.
  • Responde a las preguntas de forma clara y concreta. No uses monosílabos ni interrumpas al entrevistador.
  • Si bien puedes encontrarte con preguntas muy diferentes en cada entrevista de selección, hay algunas que son comunes. Si las preparas de una forma razonada (y no memorizándolas), podrás responderlas con seguridad y soltura. Algunas de estas preguntas habituales son:
  • “Hábleme de usted”. Piensa que el seleccionador ya tiene tu currículum. Así que se trata de indicar de forma breve tus intereses y habilidades relacionadas con el trabajo.
  • “¿Por qué desea trabajar aquí?” Responde de forma positiva, reafirmando tu interés por la empresa: te gusta el tipo de trabajo y sientes que puedes hacerlo bien con una empresa con buena reputación.
  • “¿Por qué quiere cambiar de empleo?” No hables mal de tus trabajos anteriores, ni de tus jefes. Lo que quieres es progresar, así que comenta todas las cosas buenas que te han servido para sumar experiencia.
  • “Defectos y virtudes”. Es mejor empezar por nuestros defectos, así luego nuestras virtudes los “repararán”. Por ejemplo, “Tengo tendencia a ser demasiado organizado”, o “Termino un trabajo aunque ello signifique trabajar más horas”.
  • “¿Alguna pregunta?” Si la haces, demostrarás tu interés. Aprovecha para aclarar detalles, ver cómo funciona la empresa, etc.: ¿”Voy a trabajar solo o con otras personas?”, “¿Es un puesto nuevo?”, “¿Existe un período de prueba?”, etc. En último lugar puedes preguntar cuándo tendrás noticias sobre el proceso de selección.
Ten en cuenta, además, que las personas recuerdan lo primero que ven y lo último que escuchan. Aprovecha para volver a mostrar tu interés por el trabajo y cómo puedes contribuir con la empresa. Asegúrate de que el entrevistador tenga los datos para poder contactar contigo. Con esta actitud colaborativa y amable, despídete de tu entrevistador, y a esperar la llamada que puede cambiar tu vida.

Fuente: Quécursar

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